La Mitología Kushita proviene de relatos antiguos ligados al Reino de Kush, miembro histórico del antiguo régimen de Nubia que se desarrolló en la época de las civilizaciones antiguas de Egipto, Roma y Grecia.
Origen del Imperio Kushita
Son muchos los nombres que se le da a los pobladores de este imperio, para los Eratóstenes se les denominaba nubai (nubios), los egipcios les decían nehesyw (negros), y para los griegos y romanos eran etíopes (los del rostro quemado).
Por este motivo, suele haber cierta confusión al hablar sobre los kushitas ya que como se les llamaba por distintos nombres se pensar que no son lo mismo. Cabe destacar, que el antiguo reino de Nubia está conformado por dos grandes terrenos que estaban divididos por Kush al sur (entre la segunda catarata y la confluencia del Nilo Azul y del Nilo Blanco) y Wawat al norte (hasta la segunda catarata del río Nilo).
Por su parte, el territorio de Kush es otra versión de la palabra egipcia Nubia y esta época se destaca porque tuvo dos fases napatiense y la meroítica.
Inicialmente el antiguo rey Alara unió todo Nubia Superior y estableció lo conocido como Napata como la capital religiosa de Kusk, situada justo después de la catarata del Nilo.
Se piensa aproximadamente en 750-300 a. C., la etapa napatienese tuvo su mayor auge e importancia en las costumbres egipcias.
Por consiguiente, la era Kushita tuvo su mayor esplendor cuando el rey Pianjy consiguió controlar el Alto Egipto, estableciendo la Dinastía XXV de Egipto, el mismo reunió al país y consolido su dinastía como la única, también llamó a sus orígenes faraones negros, faraones etíopes o también faraones kushitas.
No obstante, Asiria, venció al rey en la guerra y se apoderó de la ciudad de Menfis en donde expulsó a todos los kushitas del Alto Egipto además de que impuso como faraón a Necao I.
Esto trajo como consecuencia que con el pasar de los años la dinastía kushita decayó en gran medida a las guerras perdidas y pérdida de territorio, por lo que la cultura se africanizó y a partir de 150 a. C. donde ya se inició la implementación de una lengua y escritura propias.
Principales Dioses de la Mitología Kushita
Son pocos las deidades que se le conocen a la mitología Kushita debido a que esta tuvo un cierto decaimiento con el pasar de los años, sin embargo, al provenir de una mezcla cultural tan diversa se pueden destacar las siguientes deidades de la época:
Amesemi
Diosa de la época Nubia que es representada en forma de mujer que se destacaba por tener una cabeza de un doble halcón rodeado por un disco solar.
Se le conoce como la compañera del dios león Apedemak.
Su imagen se encuentra en la pared lateral septentrional del templo del león en Naga, junto con otras deidades.
Amesemi se destaca de las demás porque se piensa que es mucho más corpulenta, ya que las mujeres del reino meroe son así.
Asimismo, su nombre se descubrió gracias a las inscripciones en los monumentos que se encuentran en el templo de amón en naqa amesemi, en el cual se puede observar con la kandake amanishakheto.
Apedemak
Deidad principal de Kush o Nubia, fue muy adorado en naga y se especula que debod, lugar en donde le dicen pa-ere-meky, lo que significa «el protector».
Su aspecto fue determinado al observar en el templo de naga que fue representado como un hombre con una cabeza de león, Apedemak fue el esposo de Amesemi.
Este dios ganó importancia a raíz de que provenía del imperio Nubio y sustituyó al dios principal anterior convirtiéndose en la deidad principal de los reyes de la dinastía de meroe.
Dedun
Conocido bajo varios nombres tales como deduén o dedwen , fue una deidad de los Kushitas, que estaba relacionado con los ritos funerarios y es representado como el protector de los gobernantes que ya fallecieron que pertenecían a Nubia.
Se cree que los pobladores pensaban que al quemar el incienso en los nacimientos reales el actuaba para alejar a los genios maléficos.
Este pensamiento nace que en distintos textos se dice que un complejo de templos que eran compartido por distintos dioses, se inició un incendio a manos de Dedun y por esto se le asocia con el intento de destrucción de otros dioses.
Sin embargo, en la actualidad, es una personificación también del sur.
Cabe destacar, que se le menciona en el mito de la diosa lejana, en este acompaña a shu en busca de sejmet para hacerla entrar en razón. Además, de que forma parte de la pequeña eneada.
Aspecto
Al igual que en toda la mitología Kushita, no se consigue fácilmente mucha información al respecto, lo que sí se sabe es que se piensa que su aspecto es la de un hombre joven del sur y como un halcón, no obstante, en el imperio nuevo se le representa como un león.
Culto a esta deidad
Según reflejan los textos de las pirámides no existe ninguna constancia de que fuera adorado en todas partes de Kush equitativamente, pero en la dinastía XVIII, se le construyó una fortaleza en su honor en el-lesiya y en uronarti, en el desierto de Nubia.
Hay que señalar que, fue rescatada de las aguas del lago nascer una pequeña capilla en su honor para ser instalada en la nueva kalabsha.
Por otro lado, a Dedun se le rendía culto porque el incienso es un elemento muy importante de la cultura, ya que purificaba el aire de las estancias del rey y ahuyentaba los malos espíritus.
Asimismo, en la época era un material de lujo muy costoso que según los aldeanos aporto prosperidad y abundancia.
Mandulis
De origen Nubio pero con un nombre griego, es un dios que representa la juventud solar en la mitología Kushita.
Apariencia
Existe una gran disyuntiva en cuanto luce porque son muchas las versiones de cómo luce Mandulis.
Es conocido como un varón o un niño que tiene usa como tocado una corona hemhem, posee además cuernos retorcidos, altas plumas, disco solar y cobras.
También, se representa en forma de halcón que posee una cabeza humana, que estaba peinada en la forma tradicional de nubia, adornado con la corona atef, cuernos horizontales, dos altas plumas, motivos vegetales y discos solares.
Sin embargo, existe una 3 postura sobre cómo luce algunas veces también se le representa como un león.
Culto
Venerado en la baja Nubia, específicamente por los blemios, nómadas de la región entre el río nilo y la costa del mar rojo.
Menhit
Reconocida como la diosa que se sacrifica, Menhit, es la deidad de la guerra, en la mitología kushita, su origen viene de Nubia.
Para los aldeanos representa el gran poder que tiene la luz, el calor y el viento del norte y su trabajo era el de proteger al faraón en la fiesta sed y se encargaba de guiarlo en las batallas.